«Una vez en una hoja de papel amarilla con líneas verdes, escribió un poema
y lo llamó «Spot»
porque ese era el nombre de su perro y de eso se trataba
y su maestro le dio una «A» y una gran estrella dorada
y su madre lo colgó en el armario de la cocina y se lo mostró a su tía
y ese fue el año en que nació su hermana, y sus padres se besaron todo el tiempo
y la niña a la vuelta de la esquina le envió una postal con una fila de X
y su padre lo metía en la cama por la noche y siempre estaba allí.

Luego, en una hoja de papel blanca con líneas azules, escribió otro poema
y lo llamó «Otoño»
porque esa era la época del año y de eso se trataba
y su maestra le dio una «A» y le dijo que escribiera con más claridad
y su madre le dijo que no lo colgara en el armario de la cocina porque dejaba marcas
y ese fue el año en que su hermana recibió lentes y sus padres nunca más se besaron
y la niñita de la esquina se rió cuando se cayó con su bicicleta
y su padre no lo arropaba por la noche.

Entonces, en otra hoja de papel arrancada de un cuaderno, escribió otro poema
y lo llamó «Absolutamente nada»
Porque de eso se trataba todo
y su maestro le dio una «A» y una mirada inquisitiva
y no se lo mostró a su madre
y ese fue el año en que atrapó a su hermana besándose en el porche trasero
y la niñita de la esquina estaba demasiado maquillada para que se riera cuando la besaba
pero el la beso de todos modos
y se metió en la cama a las tres de la mañana con su padre roncando ruidosamente en la habitación de al lado

Finalmente, en el interior de una caja de cerillas escribió otro poema
y lo llamó «?» porque de eso se trataba todo
Y se dio una «A» y una barra en cada muñeca y la colgó en el espejo del baño.
Porque no pudo llegar a la cocina «.

Earl Reum
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