“Otra forma de estar preparado es pensar negativamente. Sí, soy un gran optimista. pero, cuando trato de tomar una decisión, a menudo pienso en el peor de los casos. Yo lo llamo ‘el factor devorado por los lobos’. Si hago algo, ¿qué es lo más terrible que podría pasar? ¿Me comerían los lobos? Una cosa que hace posible ser optimista es tener un plan de contingencia para cuando se desate el infierno. Hay muchas cosas de las que no me preocupo, porque tengo un plan en marcha si lo hacen «.

Randy Pausch,

La última conferencia.